Una vez llegó a un pueblo de la
selva un señor muy bien vestido, se instaló en el único hotel que había y puso
un aviso en la última página del periódico local, diciendo que estaba
dispuesto a comprar
cada mono que le trajeran por 10$.
Ante la falta de recursos de la población, los campesinos sabiendo
que la selva estaba llena de monos salieron corriendo a cazarlos.
El hombre compró, como había prometido en el anuncio, los cientos
de monos que le trajeron a 10$ cada uno sin rechistar.
Pero, como ya quedaban muy pocos monos en la selva, y era difícil
cazarlos, los campesinos perdieron el interés por la caza de estos. Entonces el
hombre ofreció 20$ por cada mono y los campesinos corrieron
otra vez a la selva.
Nuevamente fueron mermando los monos y el hombre elevó
la oferta a 25$ y los campesinos volvieron a la selva, cazando los
pocos monos que quedaban, hasta que ya era casi imposible encontrar uno.
Llegado a este punto, el hombre ofreció 50$ por cada mono, pero
tenía negocios que atender fuera en la ciudad, dejó a cargo de su ayudante el
negocio de la compra de los monos.
Una vez que viajó el hombre a la
ciudad, su ayudante se dirigió a los campesinos diciéndoles: “Fíjense en
esta jaula llena de miles de monos que mi jefe compró para su colección. Yo les ofrezco venderles a
ustedes los monos por 35$ cada uno y cuando mi jefe regrese de la
ciudad, se los venden por 50$”.
¡¡¡ Los campesinos juntaron todos
sus ahorros y compraron los miles de monos que había en la gran jaula y esperaron
el regreso del jefe !!!
Desde ese día no volvieron a ver ni al ayudante
ni al jefe. Lo único que vieron fue la jaula llena de monos que
compraron con sus ahorros de toda la vida.
ESTE CUENTO SE USA PARA EXPLICAR
EL FUNCIONAMIENTO DEL MERCADO DE VALORES